Después de casi 13 años, el calvario con el predio ubicado en la transversal 60 n.° 117-10, justo en el brazo del humedal Córdoba, no termina. A pesar de los sellamientos que la alcaldía de Suba ha interpuesto a los propietarios por hacer uso inadecuado del suelo, recientemente empezaron obras en el lugar.
Aunque, según los planos de la Empresa de Acueducto de Bogotá (EAB), el establecimiento se halla dentro de la reserva ambiental, es de propiedad de un particular. Sin embargo, su único uso posible es el forestal protector –la siembra de árboles–, así como la recreación pasiva.
Pero, hasta el momento, esa situación no se ha cumplido. Inicialmente, construyeron un lote; después lo convirtieron en un parqueadero donde se comercializaban autos bajo la razón social Automotora Nuevo Milenio y, finalmente, el lugar se utilizaba para exhibir carros.
“Es un predio privado, su único uso permitido, por norma, es la arborización y ahí hay una cantidad de usos no permitidos, que la alcaldía debería evitar interponiendo multas sucesivas”, dijo Mauricio Castaño, miembro del comité ambiental del humedal y residente de Niza Antigua.
Cada vez son más los carros que hay estacionados en el predio. Tenían autos de segunda y ahora tienen exhibidos hasta clásicos.
Pero lo más desalentador es que, a pesar de las diferentes denuncias y procesos jurídicos que se adelantan, estos no han dado resultado y la situación empeora. Esta vez, los propietarios rompieron el andén para construir una rampa de acceso vehicular.
“Lo que deben hacer las entidades es encontrar una solución definitiva, no es posible que sigan violando la política de humedales”, agregó Castaño.
En la mira de la alcaldía
Y si bien este predio está ubicado justo al lado de la oficina del humedal Córdoba, y sobre un brazo del ecosistema, el Acueducto no lo ha podido intervenir por pertenecer a un particular. Pese a que la comunidad solicitó que la entidad lo comprara, esta explicó que “adelanta estudios preliminares técnicos y jurídicos para establecer la situación legal del predio”.
Por parte de la alcaldía de Suba, el caso se encuentra en la oficina jurídica desde hace varios años. Por el mal uso del suelo, se han efectuado varios sellamientos, declarando como infractores a los diferentes propietarios.
Uno de ellos se hizo por utilizar el espacio para comercializar vehículos, y la alcaldía ordenó el cierre definitivo. No obstante, los sellos fueron retirados. Esa es la razón por la cual tiene programada una visita en los próximos días. “Se procede a ratificar el sellamiento y la suspensión de las obras mediante otra resolución, que será remitida a la Fiscalía”, explicaron.
DAIHANA GONZÁLEZ RESTREPO
Redacción EL TIEMPO ZONA
